Amibiasis intestinal. Colonoscopia en Bogotá

La amibiasis es la infección producida por un parásito protozoo o entamoeba histolytica especie parasitaria del hombre que puede vivir como comensal en el intestino grueso, invadir la mucosa intestinal provocando úlceras e incluso localizarse extra intestinal causando en ocasiones absceso hepático amebiano.

Fue descubierta en 1859 por Lambl en un niño de Praga; no obstante el verdadero descubridor del  causante de la amibiasis fue F.A. Losch de San Petersburgo, el cual logro reproducir un cuadro de disentería (diarrea con moco y sangre) de un enfermo a un perro. El género Entamoeba posee dos formas el quiste y la forma vegetante o Trofozoito.

09_13_2013_07_38_46_mediumLa forma vegetativa de E. histolytica se adquiere por contaminación fecal-oral al igual que la hepatitis A y el Helicobacter pylori ( es decir por tomar o consumir agua y o alimentos contaminados con materia fecal que contengan la forma infectante o quiste ); una vez ingeridos sufren la acción de los jugos digestivos  que debilitan su pared y en el intestino delgado se rompen y dan origen a trofozoitos  que evolucionan hasta ser patógenos; llegan hasta la luz del colon donde se transforman en sus formas productoras de enfermedad, los  trofozoitos que se pueden encontrar en la luz del colon o invadiendo la pared intestinal, donde se reproducen por simple división binaria. En el medio externo los quistes permanecen viables en condiciones apropiadas durante semanas o meses y son diseminados  por agua, manos, artrópodos, alimentos y objetos contaminados. Las amebas pueden permanecer a nivel intestinal en la forma de quistes sin provocar molestias y existen factores tanto del huésped, tipo de cepas (virulentas), infección virales y de la  flora intestinal que en un momento dado determinan su activación y producción de la enfermedad. Los pacientes que han sufrido absceso hepático amibiano, muy raramente experimentan un nuevo ataque, lo que sugiere una inmunización post-infecciosa.

Los trofozoitos de E. histolytica invaden la mucosa del colon a través de las glándulas de lieberkuhn, se multiplican activamente, pasan la muscularis mucosa y llegan hasta la  submucosa donde encuentran mejor ambiente para reproducirse y formar verdaderas colonias. Progresivamente se van destruyendo los tejidos en forma horizontal y se producen ulceraciones amplias en el fondo, con un orificio pequeño de entrada  y constituyen las típicas ulceraciones en “botón de camisa “; por lo general se detienen en la muscular, pero en ocasiones pueden penetrarla y extenderse  hasta la serosa causando perforación. Las lesiones iniciales se presentan en cualquier parte del colon pero predominan en el ciego y la válvula ileocecal;  inician microscópicas hasta ser visibles como pequeño nódulo de pocos milímetro con un orificio central rodeado de hiperemia, éstas crecen confluyen y llegan a formar ulceraciones mayores de un centímetro ovaladas ó redondeadas con bordes elevados e irregulares, rodeadas de zonas hiperémicas con fondo cubierto de fibrina : En raros casos puede progresar y pasar de cuadros disentéricos y grandes ulceraciones gangrenosas.

En Colombia se ha calculado que el 75% de las personas que tienen quistes de E. histolytica en sus  materias fecales son asintomáticas, el 20% presentan amibiasis crónicas y solo el 5% tienen la forma aguda. Por lo cual existen varias formas clínicas de manifestarse:

  • Amibiasis asintomática. Se diagnóstica en exámenes de coprológico que muestra únicamente quistes, que viven en la luz del colon  y no invaden la mucosa  constituyendo la principal forma de diseminación de la enfermedad.
  • Amibiasis crónica. Se presentan algunos síntomas de colitis sin disentería como dolor tipo cólico abdominal, cambios en la hábito gastrointestinal (períodos de estreñimiento alternando con diarreicos), moco y rara vez escaso sangrado. Pujo y tenesmo leve.
  • Amibiasis Aguda es la amibiasis intestinal o disentería amibiana que es la diarrea que inicia abundante y blanda y luego de menor volumen con moco y sangre. El paciente presenta la necesidad de defecar con mucho esfuerzo, lo que constituye el síntoma del pujo, seguido de disminución en la cantidad de materia fecal eliminada y mucosanguinolanta (con moco y sangre) el bien llamada esputo rectal. Le deposición al pasar por el ano, provoca una sensación de quemazón o desgarramiento. En el recto persiste un espasmo doloroso que produce la necesidad de una nueva evacuación, la cual puede o no ser infructuosa, llamada tenesmo. El número de defecaciones diarias puede ser de 6 o más.
  • Complicaciones: Amibiasis perforada; Ameboma (masa en ciego, sigmoides o recto) algunos con cuadros de obstrucción intestinal. Absceso amibiano

Diagnóstico diferencial:

El 50% de las diarreas infecciosas pueden ser ocasionadas por rotavirus y E. Coli  entero patógena, enterotoxigénca o invasiva. El 25% por bacterias como Shigella, Samonella, camnpylobacter y Yersinia. El resto parasitario entre ella E. histolpytica, Giardiasis, Stronyloides entre otros. Dentro de las enfermedades no infecciosas se encuentran  la Enfermedad infkamatoria intestinal del tipo de la colitis ulcerativa, colon irritable, diverticulitis, poliposis e incluso el adenocarcinoma colorectal y la colitis isquémica.

El Diagnóstico de las presentaciones agudas se confirma por el hallazgo en las heces en un examen de coproscópico de trofozoitos de Entamoeba histolytica

Existen muchos tratamientos efectivos siendo la administración oral de imidasoles y entre ellos de Metronidasol a las dosis de acuerdo al peso y edad durante 10 a 21 días cada 8 horas, se constituye en la piedra angular del tratamiento que en algunos casos debe asociarse a un antibiótico del tipo de las quinolonas (cirprofloxacina o levofloxacina) cuando se sospecha co-infección bacterina. Existen en las formas crónicas nuevas opciones como el uso de Nitazoxanida oral.

Dr. Guillermo Segundo Pérez González MD. Gastroenterólogo. Médico Internista Bogotá.
Endoscopia Bogotá.Colombia.Tel.5203636-3806.

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